CAMINO A UN NUEVO RODRIGAZO ?

LA LIBERACIÓN DEL CEPO AL DOLAR TRAE DESCONFIANZA EN EL MERCADO Y TEMEN POR  UN DESABASTECIMIENTO MASIVO

De  manera sorpresiva, y en una conferencia de prensa exprés en conjunto con el ministro de Economía, Axel Kicillof, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, anunció que el Gobierno "decidió autorizar la compra de dólares para tenencia y ahorro". La medida, que significa una flexibilización en las restricciones del polémico cepo cambiario, comenzará a regir a partir del próximo lunes.

KICILAZO CON PERFUME SETENTOSO

hay gran expectativa en la city por saber a cuanto cierra el dolar oficial en el día de hoy, a todo esto el gobierno afirmo que al momento de la compra el comprador debe justificar sus ingresos ante la AFIP, de todas maneras el lunes se definira el verdadero valor que le otorga el gobierno a la moneda estadounidense quien ademas se le debe sumar un recargo de un 20%  mas a su valor oficial.

Según los economistas afirmaron casi en conjunto,que la incertidumbre de la medida generara una demanda tal que la suba del dolar no tendrá techo, esto afectara directamente en el bolsillo de los trabajadores y la inflación que antes se ocultaba en cuotas, hoy definitivamente es una realidad que obliga a las grandes empresas a especular con la venta , la desconfianza motorizara a la especulación  que indefectiblemente terminara en un desabastecimiento general.

Esta medida lejos esta de ser un alivio cambiario para frenar la escalada del dolar ilegal sino que impulsa la proliferación de cuevas dada la demanda y la poca contención que el gobierno nacional ofrece.

MANOTAZO DE AHOGADO

Celestino Rodrigo ministro de economía de Isabel Peron

El golpe económico en los ahorros se vera afectado considerablemente en aquellas cuentas que tengas sus activos en pesos ya que se verían devaluadas considerablemente, un nuevo Rodrigazo se gesto en la Argentina , así como sucedió en los años setenta con el gobierno de Isabel Peron ,donde el peso argentino se pulverizo de la noche a la mañana , de esta manera el ministro Kicillof perdió la pulseada con el  establishment  económico dejando la economía argentina al borde de una crisis social con ribetes insospechados .

El apego nostálgico con los años setenta que el gobierno kirchnerista sostiene, esta  vez le jugo una mala pasada  y nunca tan vigente aquel viejo refrán que dice..." Tanto fue el cántaro a la fuente que al final se rompe" .

COMO FUE EL RODRIGAZO DE ISABEL PERON

Del Rodrigazo de Isabelita al Kicilazo de Cristina

El “Rodrigazo” fue uno de esos episodios para no olvidar, para no repetir. Su responsable fue Celestino Rodrigo, Ministro de Economía de la presidencia de María Estela Martínez de Perón, quien aplicó una política de ajuste que provocó una devaluación del 60%. Esta medida generó una de las mayores crisis que recuerda la Argentina.

Celestino Rodrigo nació en Buenos Aires el 19 de mayo de 1915. Cursó el secundario en una de las instituciones más prestigiosas del país, el Colegio Nacional Buenos Aires y luego se recibiría de ingeniero en la Universidad de Buenos Aires. Seguiría vinculado a la UBA, en dónde dictó clases y durante muchos años se abocó a la dirección de empresas mineras e industriales.

Su ligazón con la política comenzaría con su colaboración a través del general Manuel Savio, en el desarrollo de la siderurgia estatal. Luego, trabajaría en la presidencia de Juan Domingo Perón, en el Banco Nacional de Desarrollo.

Pero su popularidad llegaría tras la muerte de Perón, y la sucesión en la presidencia de su viuda, María Estela Martínez. En los inicios, el vínculo de Rodrigo con esta gestión fue a partir de su gestión de varios proyectos en los que propició la alianza entre Argentina y Libia y además, estuvo a cargo de una cruzada solidaria propiciada por el Estado, que terminó convirtiéndose en un escándalo público.

Su accionar en este acto, lo puso en contacto con el Ministro de Bienestar Social y Salud Pública, José López Rega, el dirigente más poderoso e influyente de aquel entonces. Corría 1975 y hasta entonces era un año signado por el aumento de la inflación y la escasa inversión productiva. En este marco, renuncia el Ministro de Economía, Alfredo Gómez Morales, y así Celestino Rodrigo es elegido para ocupar el cargo el 2 de junio.

Una particularidad de su asunción fue que viajó al acto, que se realizó en la Casa Rosada, en subte para que la prensa capturara el momento y diera una imagen de “austeridad” ante el pueblo.

“Mañana me matan o mañana empezamos las cosas bien”, así el flamante titular de la cartera de Economía empezaba su gestión convirtiendo esta frase en alguno de los dichos tristemente célebres que los funcionarios públicos tienen acostumbrados a los argentinos. Una de las medidas de aquel día fue un pronunciado aumento de tarifas en los pasajes de la empresa Aerolíneas Argentinas y muchos pasajeros quedaron varados en el Aeropuerto de Ezeiza , ya que se pretendía cobrarles al embarcar el aumento de boletos que ya habían sido pagados.

A tan sólo dos días de su asunción, Rodrigo anunció un paquete de medidas económicas que el tiempo le daría el nombre de “Rodrigazo”. Los anuncios fueron: la devaluación de más de un 150% del peso en relación al dólar comercial, un aumento promedio del 100% en el precio de todos los servicios públicos y transporte y una suba de hasta un 180% de los combustibles. Como contrapartida, anunció un aumento del 45% de los salarios.

Para legitimar el gran ajuste, el ministro brindó una conferencia de prensa en la que instaba a la población a “ir en contra del consumismo” y le pidió expresamente a todos los argentinos que disminuyeran sus gastos lo máximo posible, especialmente en todo lo referente a productos y servicios importados.

El “Rodrigazo” provocó la caída estrepitosa de la clase media argentina. Pequeñas industrias, empresas y comerciantes, se encontraron en quiebra. El dólar paralelo cotizó arriba de los 40 pesos y el aumento del dólar oficial fue de entre un 80 y un 160%. Los autores del libro “Don Rodrigo”, Raúl Dellatorre y Néstor Restivo, brindan la postal del momento: “Las naftas subieron hasta 181 por ciento; la energía, 75, y las tarifas de otros servicios públicos, entre 40 y 75 por ciento.

En los días siguientes continuaron las novedades. El boleto de colectivo pasó de 1 a 1,50 peso y los pasajes de tren subieron entre 80 y 120 por ciento. Para los salarios se habían fijado en mayo aumentos de sólo 38 por ciento, que fueron elevados a 45 por ciento el 12 de junio. La inflación que desató el plan fue la peor recordada por los argentinos (hasta entonces, claro) y significó una marca indeleble, en cuanto la corrección de precios relativos que marcó la cancha en la distribución del ingreso“.

Finalmente, el 17 de julio de 1975, Celestino Rodrigo renunciaba a su cargo. Su corta estadía en el poder desató una de las crisis económicas más profundas vividas en la Argentina.