MENSAJE DE LA BRUJA MAYOR
Ante la gran expectativa sobre sus
videncias la Bruja Mayor decidió dejar un consejo a sus lectores.
Ningún culto religioso tiene que ver con la protección de las Fuerzas del Bien. Ni
la misa, ni la comunión, ni el rosario te protegen contra el trabajo de un
brujo negro. Tengo sobrada experiencia en ver cantidad de casos de personas que
van a misa y cuando se encontraron en una situación espiritual desesperada, no
consiguieron alivio con nada de eso.
La oración mecánica no sirve para nada.
Cómo obtener protección?? El trabajo es personal.
Meditación, activación de los chacras, decretar positivamente, visualizar,
cuidar cada palabra que sale de la boca, cuidar los pensamientos, pedir
protección al ángel de la guarda y aunque Uds no lo crean, los que más ayudan
son nuestros seres amados que están en el otro lado del velo. Tiene que haber
un lazo muy fuerte de amor y son los lazos de sangre. He visto gente
arrastrándose ante altares por trabajos de magia negra, sin que hayan
conseguido jamás nada. Gente sintiendo mordeduras de víboras por décadas, sin
que nadie pueda conseguirles alivio. Esos son trabajos de kimbanda, de vodoo.
Eso no lo arregla la oración mecánica ni ninguna religión, ni péndulo, ni nada.
Esa liberación viene de mucho trabajo personal y de un médium poderoso.
Envolverse en energía violeta de transmutación.
Energía dorada de éxito en todo lo que hagamos. Energía azul para la casa y el
auto. Mucho pedido a los ángeles de protección a nuestros seres queridos y a
nosotros mismos. Ordenar que todas las fuerzas del mal, de cualquier dimensión,
se alejen de nuestro camino.
El trabajo es estrictamente personal, de evolución y
progreso espiritual. No darle entidad al miedo porque el miedo atrae el mal.
Tratar de no pelear, no discutir.
Aflojar con la ansiedad y tratar de estar elevado lo
más que se pueda.
No hacerle mal a nadie porque todo vuelve y esto es
draconiano. Todas nuestras acciones quedan registradas en los akásicos, de
manera que todo lo que hacemos mal es estrictamente karmático. Lo pagaremos, ya
sea en esta dimensión o en la otra. Y naturalmente aprenderemos la lección en
la próxima encarnación, con sufrimiento.
