AFIRMAN QUE EL “ALMA MULA” SE COMIO EL CORAZÓN DE SEIS CABRITOS
“Eran cerca de las 3.30 de la madrugada, cuando en medio de
un viento sur, se sentía un extraño balido en el corral, es por eso que
buscamos la linterna y fuimos a ver qué pasaba. Cuando alumbramos hacia los
corrales, vimos salir enardecido a UN EXTRAÑO BICHO NEGRO, era como un perro
muy grande que se metió en el monte”. Así relató los hechos a El Liberal Carlos
Pereyra, que fue testigo de lo que pasó junto a su esposa y sus dos hijos.
Todos alcanzaron a ver cómo este extraño animal se perdía en
la oscuridad. Esta familia del barrio Alomo, al oeste de Quimilí, no sale de su
asombro. Sus corrales fueron blanco del ataque de una criatura inexplicable
que, en medio del viento sur, irrumpió y comenzó a comerles el corazón, uno a
uno, a todos sus cabritos.
“Cuando llegamos al corral, había 3 cabritos muertos, con
sus órganos afuera, seguimos alumbrando y recorriendo el lugar y había
desparramados otros tantos con el mismo ataque. El bicho los mató y a todos les
comió el corazón, de igual manera mató a una cabrilla”, contó Pereyra,
acongojado. Para él no se trata de un perro ni de un león.
“El perro no ataca así, no va a matar tantos en tan
poco tiempo, para mí esto es el ‘almamula’”, dijo el dueño de los cabritos.
“Hace más de 20 años que vivo criando animales en la zona,
aquí ningún vecino se quejó ni vio rastros de un puma o león, aquí no hay de
estos bichos porque estamos muy cerca del pueblo (500 metros del casco
céntrico). Tampoco esto es un ataque de un perro, el perro no ataca de esa
manera, no va a matar tantos en tan poco tiempo, para mí esto es el ‘almamula’,
por la forma en que mató y atacó a los cabritos”, denunció Pereyra .
“Mi señora y los chicos tienen un poco de miedo, pero algo
tenemos que hacer. Va a venir mi papá y unos amigos con las escopetas y vamos a
esperar, porque estoy seguro de que nos va a volver a atacar. Si me da lugar,
no voy a dudar, yo le tiro. Porque, si no, nos va a seguir haciendo daño”,
advirtió.
“Yo tengo mucho miedo. Con los chicos nos vamos a dormir en
la otra casita, un poco más alejada de los corrales”, dijo Estela, la esposa:
“Ellos (por su esposo y su suegro) se van a quedar a esperar a ver si ataca de
nuevo. Sentimos mucho dolor por la pérdida de los animales que veníamos criando
para vender para las fiestas, con mucho sacrificio los veníamos criando y
perderlos así, de la noche a la mañana, nos causa mucho dolor”.
OTRO TESTIMONIO ATERRADOR
Un caso llamativo fue el que le paso a
Carlos Trapero Díaz (Oriundo de Buenos Aires) cuando se encontraba de visita en
casa de un amigo de Santiago y así comienza el relato:
Nos encontrábamos cazando en el
campo, hasta ahí todo marchaba bien en el pueblo de “Alto Pozo”. Ya viendo que
se hacían las seis de la tarde y el sol comenzaba a esconderse, le dije a mi
amigo, vamos a tu casa ya se está haciendo de noche. Cuando emprendíamos el
viaje de regreso veníamos charlando de hace cuanto que no nos veíamos y de como
había cambiado todo. Cuando de pronto llegando al pueblo comenzamos a sentir
como los perros se volvían locos y comenzaban a aullar. Mi amigo que venía
conmigo en moto empezó a aumentar la marcha, entrando al pueblo, como era un
pueblo chico y las casas estaban alejadas unas de otras no había mucha gente
afuera porque además era invierno. De pronto mi amigo se baja de la moto
horrorizado sale corriendo para el lado de la casa dejando la moto en un
costado apoyada. Al ver esta escena yo también corro hacia la casa y mi amigo
aterrado me dice agáchate tirándose abajo de una mesa. Cuando de pronto
comenzamos a escuchar como si fuera un bebe que llora con desesperación y de
repente por una ventana diviso un espectro, era un enano con cuatro patas y
estaba vestido con harapos sucios y atrás de el venían una jauría de perros
corriéndolo. Cuando me voy a la otra ventana para verlo mejor me mira y tenía
como huecos negros en lo que serian los ojos. Y de pronto empiezan a venir más
perros y lo comienzan a correr y este
espectro se aleja a gran velocidad corriendo con sus patas malignas. Cuando se
va esta aparición mi amigo no quería omitir palabra y nos quedamos debajo de la mesa hasta que
llego el padre de trabajar en el campo. Cuando llego le comentamos lo que
habíamos visto y nos conto que era el Alma Mula y su leyenda. Nos hizo rezar y
hasta el día que narro esto no fui más a
visitar a mi amigo…
LA LEYENDA DEL ALMA MULA
También llamada Mulalma , este engendro es una mujer
condenada por pecados muy graves en contra del pudor. Galopa por los campos
haciendo un ruido metálico La Mulánima
(dibujo de CATU estruendoso - como si arrastrara cadenas -; echa fuego por la
boca, los ollares y los ojos y mata a la gente a dentelladas o a patadas. Se la
ve sólo de noche y su apariencia es la de una mula envuelta en llamas..
En Tafí del Valle se ha encontrado, en la "Ruta de
Birmania" (camino que lleva al Ojo de Agua y que pasa por detrás de la
Loma del Pelao), una piedra con una pisada de este animal.
Se comenta que sólo un hombre con mucha Fe o muy valiente
puede escapar de su infalible ataque. Para repelerla o defenderse se debe
repetir tres veces "Jesús, María y José".
Algunas personas dicen que el Alma-mula es el Diablo
mismo.
Elena Bossi en Seres Mágicos, nos cuenta que la Mulánima es
una mujer condenada que se transforma de noche, con la primera campanada de las
doce, en una mulita chica, que anda galopando y arrastrando cadenas, mientras
da rebuznos estridentes y desesperados. La misma autora narra que el grito de
la Mulánima es a veces como un relincho y otras como un llanto de mujer… y que
el periplo de este ser termina en la puerta de una iglesia, emprendiendo el
camino de regreso.
“Lleva las riendas suelta, de modo que al correr las pisa y
se lastima la boca con el freno” cuenta Elena Bossi, lo que agranda aún más la
desesperación del fabuloso animal. Hasta se dice que sale mayormente en tiempos
de tempestad y que ataca las majadas, comiendo algunos animales y dejando otros
heridos.
Juan Carlos Dávalos, el gran escritor salteño, relata que un peón suyo, “allá por los
No hay comentarios:
Publicar un comentario